Tu cuerpo no me pertenece
No obstante lo hago mío por un breve instante
en el cual soy tú
penetrada, satisfecha,
amada
mujer pues
Cuando vuelvo en mi estoy
sudado, sonriente y agradecido
con los dioses
con la vida
con el pasado
por traerme a ti
cargado de palabras añejas
y estos sueños de amor
por construir
Así estoy.