Sedientos de espumas

Corpus Christi, celebración devocional y rebelde.

Dentro de las distintas diabladas establecidas en Aragua la de Turiamo merece un nicho especial. Reubicados en Maracay, en los barrios 23 de Enero, El Recurso y La Coromoto luego de su desalojo de la bahía de Turiamo el 30 de marzo de 1.957, durante la dictadura del general Marcos Pérez Jiménez han sido fieles a la devoción del Santísimo Sacramento a pesar de las dificultades que implican el haber sido expulsados de su terruño.

Nos apropiamos de las palabras del amigo Roberto Correa quien afirma que: “La devoción y la fe de este grupo humano, se deja ver en los Diablos Danzantes, que con fervor acuden a “rendir” ante el Santísimo en la iglesia de La Coromoto, o en la pequeña capilla del barrio El Recurso, centros testigos de una tradición trasplantada...

La manifestación, en sí, posee una estructura interna con indumentaria propia, con jerarquías establecidas y respetadas por sus integrantes y por la comunidad misma, quienes de alguna u otra manera fortalecen la unidad del grupo de promeseros”.

Turiamo ya no es casas ni calles sino una base naval. Turiamo vive en el corazón de los más viejos y en la memoria sonora de los más jóvenes. Turiamo pervive más allá del desalojo, la añoranza, el desarraigo, la distancia en el tiempo y la geografía. Por la vía cultural estos hombres y mujeres han sabido mantener viva una tradición que profesan con fervor, demostrando que la rebeldía no siempre es un acto de violencia sino un acto de fe.